ÉXODO 13:17-17:16
JUECES 4:4-5:31
בשׁלח-Cuando los dejó ir
13
17 Cuando Faraón dejó ir al pueblo, Elohim no los guió por el camino de la tierra de los filisteos, aunque estaba cerca, porque dijo Elohim: «No sea que el pueblo se arrepienta cuando vea guerra y se vuelva a Egipto».
18 Elohim, pues, hizo que el pueblo diera un rodeo por el camino del desierto, hacia el Mar Rojo. En orden de batalla subieron los hijos de Israel de la tierra de Egipto.
LOS HUESOS DE YOSEF
19 Mosheh tomó consigo los huesos de Yosef, pues este había hecho jurar solemnemente a los hijos de Israel y dijo: «Ciertamente Elohim los visitará, y entonces se llevarán de aquí mis huesos con ustedes».
Génesis 50:24 ,Josue 24:32
20 Y salieron de Sucot y acamparon en Etam, al borde del desierto.
21 Yehovah iba delante de ellos, de día en una columna de nube para guiarlos por el camino, y de noche en una columna de fuego para alumbrarlos, a fin de que anduvieran de día y de noche.
22 No quitó de delante del pueblo la columna de nube durante el día, ni la columna de fuego durante la noche.
14
1 Yehovah habló a Mosheh y le dijo:
2 «Di a los hijos de Israel que den la vuelta y acampen delante de Pi Hahirot, entre Migdol y el mar. Ustedes acamparán frente a Baal Zefón, en el lado opuesto, junto al mar.
3 Porque Faraón dirá de los hijos de Israel: “Andan vagando sin rumbo por la tierra. El desierto los ha encerrado”.
4 Pero Yo endureceré el corazón de Faraón, y él los perseguirá. Y seré glorificado por medio de Faraón y de todo su ejército, y sabrán los egipcios que Yo soy Yehovah». Y así lo hicieron.
5 Cuando le anunciaron al rey de Egipto que el pueblo había huido, Faraón y sus siervos cambiaron de actitud hacia el pueblo, y dijeron: «¿Qué es esto que hemos hecho, que hemos permitido que Israel se fuera y dejaran de servirnos?».
6 Faraón preparó su carro y tomó consigo a su gente.
7 Tomó 600 carros escogidos, y todos los demás carros de Egipto, con oficiales sobre todos ellos.
8 Yehovah endureció el corazón de Faraón, rey de Egipto, y este persiguió a los hijos de Israel, pero estos habían salido con mano fuerte.
9 Los egipcios los persiguieron con todos los caballos y carros de Faraón, su caballería y su ejército, y los alcanzaron acampados junto al mar, junto a Pi Hahirot, frente a Baal Zefón.
10 Al acercarse Faraón, los hijos de Isreal alzaron los ojos, y vieron que los egipcios marchaban tras ellos. Entonces los hijos de Israel tuvieron mucho miedo y clamaron a Yehovah.
11 Y dijeron a Mosheh: «¿Acaso no había sepulcros en Egipto para que nos sacaras a morir en el desierto? ¿Por qué nos has tratado de esta manera, sacándonos de Egipto?
12 ¿No es esto lo que te dijimos en Egipto: “Déjanos, para que sirvamos a los egipcios”? Porque mejor nos hubiera sido servir a los egipcios que morir en el desierto».
13 Pero Mosheh dijo al pueblo: «No teman; estén firmes y vean la salvación que Yehovah hará hoy por ustedes. Porque los egipcios a quienes han visto hoy, no los volverán a ver jamás.
14 Yehovah peleará por ustedes mientras ustedes se quedan callados».
15 Entonces dijo Yehovah a Mosheh: «¿Por qué clamas a Mí? Di a los hijos de Israel que se pongan en marcha.
16 Y tú, levanta tu vara y extiende tu mano sobre el mar y divídelo. Y los hijos de Israel pasarán por en medio del mar, sobre tierra seca.
17 Pero Yo endureceré el corazón de los egipcios para que entren a perseguirlos. Me glorificaré en Faraón y en todo su ejército, en sus carros y en su caballería.
18 Entonces sabrán los egipcios que Yo soy Yehovah, cuando sea glorificado en Faraón, en sus carros y en su caballería».
19 El Mensajero de Elohim que había ido delante del campamento de Israel, se apartó, e iba detrás de ellos. La columna de nube que había ido delante de ellos, se apartó, y se les puso detrás,
20 y vino a colocarse entre el campamento de Egipto y el campamento de Israel. La nube estaba junto con las tinieblas. Sin embargo, de noche alumbraba a Israel, y en toda la noche no se acercaron los unos a los otros.
21 Mosheh extendió su mano sobre el mar, y Yehovah, por medio de un fuerte viento del este que sopló toda la noche, hizo que el mar se retirara, y cambió el mar en tierra seca. Así quedaron divididas las aguas.
22 Los hijos de Israel entraron por en medio del mar, en seco, y las aguas les eran como un muro a su derecha y a su izquierda.
23 Entonces los egipcios reanudaron la persecución, y entraron tras ellos en medio del mar todos los caballos de Faraón, sus carros y sus jinetes.
24 A la vigilia de la mañana (2 a 6 a.m.), Yehovah miró el ejército de los egipcios desde la columna de fuego y de nube, y sembró la confusión en el ejército de los egipcios.
25 Quitó las ruedas de sus carros, e hizo que avanzaran con dificultad. Entonces los egipcios dijeron: «Huyamos ante Israel, porque Yehovah pelea por ellos contra los egipcios».
26 Entonces Yehovah dijo a Mosheh: «Extiende tu mano sobre el mar para que las aguas vuelvan sobre los egipcios, sobre sus carros y su caballería».
27 Y Mosheh extendió su mano sobre el mar, y al amanecer, el mar regresó a su estado normal, y los egipcios al huir se encontraban con él. Así derribó Yehovah a los egipcios en medio del mar.
28 Las aguas volvieron y cubrieron los carros y la caballería, a todo el ejército de Faraón que había entrado tras ellos en el mar. No quedó ni uno de ellos.
29 Pero los israelitas pasaron en seco por en medio del mar, y las aguas les eran como un muro a su derecha y a su izquierda.
30 Aquel día Yehovah salvó a Israel de mano de los egipcios. Israel vio a los egipcios muertos a la orilla del mar.
31 Cuando Israel vio el gran poder que Yehovah había usado contra los egipcios, el pueblo temió a Yehovah, y creyeron en Yehovah y en Mosheh, Su siervo.
15
1 Entonces Mosheh y los hijos de Israel cantaron este cántico a Yehovah, y dijeron: «Canto a Yehovah porque ha triunfado gloriosamente; Al caballo y a su jinete ha arrojado al mar.
2 Mi fortaleza y mi canción es Yehovah, Y ha sido para mí salvación; Este es mi Elohim, y lo glorificaré,Elohim de mi padre, y lo ensalzaré.
3 Yehovah es fuerte guerrero; Yehovah es Su nombre.
4 Los carros de Faraón y su ejército arrojó al mar, Y los mejores de sus oficiales se ahogaron en el Mar Rojo.
5 Los abismos los cubren; Descendieron a las profundidades como una piedra.
6 Tu diestra, oh Yehovah, es majestuosa en poder; Tu diestra, oh Yehovah, destroza al enemigo.
7 En la grandeza de Tu excelencia derribas a los que se levantan contra Ti; Envías Tu furor, y los consumes como paja.
8 Al soplo de Tu aliento se amontonaron las aguas, Se juntaron las corrientes como en un montón; Se cuajaron los abismos en el corazón del mar.
9 El enemigo dijo: “Perseguiré, alcanzaré, repartiré el despojo; Se cumplirá mi deseo contra ellos; Sacaré mi espada, los destruirá mi mano”.
10 Soplaste con Tu viento, los cubrió el mar; Se hundieron como plomo en las aguas poderosas.
11 ¿Quién como Tú entre los dioses, oh Yehovah? ¿Quién como Tú, Majestuoso en Santidad, Temible en las alabanzas, haciendo maravillas?
12 Extendiste Tu Diestra, Los tragó la tierra.
13 En Tu misericordia has guiado al Pueblo que has redimido; Con Tu poder los has guiado a Tu Santa Morada.
14 Lo han oído los pueblos y tiemblan; El pavor se ha apoderado de los habitantes de Filistea.
15 Entonces se turbaron los príncipes de Edom; Los valientes de Moab se sobrecogieron de temblor; Se acobardaron todos los habitantes de Canaán.
16 Terror y espanto cae sobre ellos; Por la grandeza de Tu brazo quedan inmóviles, como piedra, Hasta que Tu Pueblo pasa, oh Yehovah, Hasta que pasa el Pueblo que Tú has comprado.
17 Tú los traerás y los plantarás en el monte de Tu heredad, El lugar que has hecho para Tu Morada, oh Yehovah, El Santuario, oh Adonai, que Tus manos han establecido.
18 Yehovah reinará para siempre».
19 Porque los caballos de Faraón con sus carros y sus jinetes entraron en el mar, y Yehovah hizo volver sobre ellos las aguas del mar. Pero los hijos de Israel anduvieron por en medio del mar sobre tierra seca.
20 Miriam la *profetisa, hermana de Aarón, tomó en su mano el pandero, y todas las mujeres salieron tras ella con panderos y danzas.
*הַנְּבִיאָ֜ה–haNebiah
21 Y Miriam les respondía: «Canten a Yehovah porque ha triunfado gloriosamente; Al caballo y su jinete ha arrojado al mar».
22 Mosheh hizo partir a Israel del Mar Rojo, y salieron hacia el desierto de Shur. Anduvieron tres días en el desierto y no encontraron agua.
23 Cuando llegaron a Marah no pudieron beber las aguas de Marah porque eran amargas. Por tanto al lugar le pusieron el nombre de Marah.
24 El pueblo murmuró contra Mosheh diciendo: «¿Qué beberemos?».
25 Entonces Mosheh clamó a Yehovah, y Yehovah le mostró un árbol. Él lo echó en las aguas, y las aguas se volvieron dulces. Y Elohim les dio allí un estatuto y una ordenanza, y allí los puso a prueba.
26 Y Elohim les dijo: «Si escuchas diligentemente la voz de Yehovah tu Elohim, y haces lo que es recto ante Sus ojos, y escuchas Sus mandamientos, y guardas todos Sus estatutos, no te enviaré ninguna de las enfermedades que envié sobre los egipcios. Porque Yo, Yehovah, soy tu sanador».
27 Entonces llegaron a Elim, donde había doce fuentes de agua y setenta palmeras, y acamparon allí junto a las aguas.
16
1 Partieron de Elim, y toda la congregación de los hijos de Israel llegó al desierto de Sin, que está entre Elim y Sinaí, el día 15 del segundo mes después de su salida de la tierra de Egipto.
2 Y toda la congregación de los hijos de Israel murmuró contra Mosheh y contra Aarón en el desierto.
3 Los hijos de Israel les decían: «Ojalá hubiéramos muerto a manos de Yehovah en la tierra de Egipto cuando nos sentábamos junto a las ollas de carne, cuando comíamos pan hasta saciarnos. Pues nos han traído a este desierto para matar de hambre a toda esta multitud».
4 Entonces Yehovah dijo a Mosheh: «Yo haré llover pan del cielo para ustedes. El pueblo saldrá y recogerá diariamente la porción de cada día, para ponerlos a prueba si andan o no en Mi ley.
*Mateo 6:11
5 Y en el sexto día, cuando preparen lo que traigan,
la porción será el doble de lo que recogen diariamente».
6 Entonces Mosheh y Aarón dijeron a todos los hijos de Israel: «A la tarde sabrán que Yehovah los ha sacado de la tierra de Egipto.
7 Por la mañana verán la gloria de Yehovah, pues Él ha oído sus murmuraciones contra Yehovah. ¿Qué somos nosotros para que ustedes murmuren contra nosotros?».
8 Y Mosheh dijo: «Esto sucederá cuando Yehovah les dé carne para comer por la tarde, y pan hasta saciarse por la mañana; porque Yehovah ha oído sus murmuraciones contra Él. Pues ¿qué somos nosotros? Sus murmuraciones no son contra nosotros, sino contra Yehovah».
9 Entonces Mosheh dijo a Aarón: «Dile a toda la congregación de los hijos de Israel: “Acérquense a la presencia de Yehovah, porque Él ha oído sus murmuraciones”».
10 Mientras Aarón hablaba a toda la congregación de los hijos de Israel, miraron hacia el desierto y, vieron que la gloria de Yehovah se apareció en la nube.
11 Y Yehovah habló a Mosheh y le dijo:
12 «He oído las murmuraciones de los hijos de Israel. Háblales, y diles: “Al caer la tarde comerán carne, y por la mañana se saciarán de pan. Sabrán que Yo soy Yehovah su Elohim”».
13 Por la tarde subieron las codornices y cubrieron el campamento, y por la mañana había una capa de rocío alrededor del campamento.
14 Cuando la capa de rocío se evaporó, había sobre la superficie del desierto una cosa delgada, como copos, menuda, como la escarcha sobre la tierra.
15 Al verla, los hijos de Israel se dijeron unos a otros: «¿Qué es esto?», porque no sabían lo que era. «Es el pan que Yehovah les da para comer», les dijo Moisés.
16 «Esto es lo que Yehovah ha mandado: “Cada uno recoja de él lo que vaya a comer. Tomarán como dos litros por cabeza, conforme al número de personas que cada uno de ustedes tiene en su tienda”».
17 Así lo hicieron los hijos de Israel, y unos recogieron mucho y otros poco.
18 Cuando lo midieron con el homer (por litros), al que había recogido mucho no le sobró, ni le faltó al que había recogido poco. Cada uno había recogido lo que iba a comer.
19 «Que nadie deje nada para la mañana siguiente», les dijo Mosheh.
20 Pero no obedecieron a Mosheh, y algunos dejaron parte del maná para la mañana siguiente, pero crió gusanos y se pudrió. Entonces Mosheh se enojó con ellos.
21 Lo recogían cada mañana, cada uno lo que iba a comer, pero cuando el sol calentaba, se derretía.
22 En el sexto día recogieron doble porción de alimento, unos dos homer (cuatro litros) para cada uno. Y cuando todos los jefes de la congregación vinieron y se lo hicieron saber a Mosheh,
23 «Esto es lo que ha dicho Yehovah», les respondió: «Mañana es Shabat , día de reposo consagrado a Yehovah. Cuezan lo que han de cocer y hiervan lo que han de hervir, y todo lo que sobre guárdenlo para mañana».
24 Y lo guardaron hasta la mañana como Mosheh había mandado, y no se pudrió ni hubo en él gusano alguno.
25 Y Mosheh dijo: «Cómanlo hoy, porque hoy es día de reposo para Yehovah. Hoy no lo hallarán en el campo.
26 Seis días lo recogerán, pero el séptimo día, Shabat, no habrá nada».
27 Y en el séptimo día, algunos del pueblo salieron a recoger, pero no encontraron nada.
28 Entonces Yehovah dijo a Mosheh: «¿Hasta cuándo se negarán ustedes a guardar Mis mandamientos y Mis leyes?
29 Miren que Yehovah les ha dado el día de reposo. Por eso el sexto día les da pan para dos días. Quédese cada uno en su lugar, y que nadie salga de su lugar el séptimo día».
30 Y el pueblo reposó el séptimo día.
31 La casa de Israel le puso el nombre de Man; y era como la semilla del cilantro, blanco, y su sabor era como de hojuelas con miel.
32 « Esto es lo que Yehovah ha mandado», dijo Mosheh: «Que se guarden un homer (unos dos litros) llenos de maná para sus generaciones, para que vean el pan que Yo les di de comer en el desierto cuando los saqué de la tierra de Egipto».
33 Entonces Mosheh dijo a Aarón: «Toma una vasija y pon en ella un omer (dos litros) de maná, y colócalo delante de Yehovah a fin de guardarlo para las generaciones de ustedes».
34 Tal como Yehovah ordenó a Mosheh, así lo colocó Aarón delante del Testimonio para que fuera guardado.
35 Los hijos de Israel comieron el maná cuarenta años, hasta que llegaron a tierra habitada. Comieron el maná hasta que llegaron a los límites de la tierra de Canaán.
36 Un omer (2.2 litros) es la décima parte de un efa (22 litros).
17
1 Toda la congregación de los hijos de Israe marchó por jornadas desde el desierto de Sin, conforme al mandamiento de Yehovah. Acamparon en Refidim, y no había agua para que el pueblo bebiera.
2 Entonces el pueblo discutió con Mosheh, y le dijeron: «Danos agua para beber». «¿Por qué discuten conmigo?», les dijo Mosheh. «¿Por qué tientan a Yehovah?».
3 Pero el pueblo tuvo sed allí, y murmuró el pueblo contra Mosheh, y dijo: «¿Por qué nos has hecho subir de Egipto para matarnos de sed a nosotros, a nuestros hijos y a nuestros ganados?».
4 Y clamó Mosheh a Yehovah y dijo: «¿Qué haré con este pueblo? Un poco más y me apedrearán».
5 Entonces Yehovah dijo a Mosheh: «Pasa delante del pueblo y toma contigo a algunos de los ancianos de Israel, y toma en tu mano la vara con la cual golpeaste el Nilo, y ve.
6 Yo estaré allí delante de ti sobre la peña en Horeb. Golpearás la peña, y saldrá agua de ella para que beba el pueblo». Y así lo hizo Mosheh en presencia de los ancianos de Israel.
7 Y puso a aquel lugar el nombre de Massah y Merivah, por la contienda de los hijos de Israel, y porque tentaron a Yehovah, diciendo: «¿Está Yehovah entre nosotros o no?».
8 Entonces vino Amalec y peleó contra Israel en Refidim.
9 Y Mosheh dijo a Yehoshuah: «Escógenos hombres, y sal a pelear contra Amalec. Mañana yo estaré sobre la cumbre de la colina con la vara de Elohim en mi mano».
10 Yehoshuah hizo como Mosheh le dijo, y peleó contra Amalec. Mosheh, Aarón y Hur subieron a la cumbre de la colina.
11 Y sucedía que mientras Mosheh tenía en alto su mano, Israel prevalecía; y cuando dejaba caer la mano, prevalecía Amalec.
12 Pero las manos de Mosheh se le cansaban. Entonces tomaron una piedra y la pusieron debajo de él, y se sentó en ella. Y Aarón y Hur le sostenían las manos, uno de un lado y otro del otro. Así estuvieron sus manos firmes hasta que se puso el sol.
13 Yehoshuah deshizo a Amalec y a su pueblo a filo de espada.
14 Entonces dijo Yehovah a Mosheh: «Escribe esto en un libro para que sirva de memorial, y haz saber a Yehoshuah que Yo borraré por completo la memoria de Amalec de debajo del cielo».
15 Y edificó Mosheh un altar, y le puso por nombre Yehovah Nissi es (mi Estandarte,)
16 y dijo: «Yehovah lo ha jurado. Yehovah hará guerra contra Amalec de generación en generación».
Haftarah ir a pag. 2
Pacto Renovado ir a pag.3
Torah תורה 